sábado, diciembre 19, 2009

Canarii en los quioscos

La revista Canarii ha dado un nuevo paso en su labor de difusión de la investigación histórica que se realiza en Canarias, con la venta en los quioscos de toda Canarias del nº16, correspondiente a los meses de octubre a diciembre de 2009. Hasta ahora la revista se distribuía gratuitamente, encartada en los principales diarios de las islas, aproximando la Historia de Canarias escrita en lenguaje sencillo a todas las personas interesadas en conocer el pasado y el patrimonio histórico de Canarias. El proyecto está impulsado por la Fundación Canaria Archipiélago 2021 y en él colaboran asiduamente historiadores de las dos universidades canarias, profesores de Educación Secundaria e historiadores que, aunque no están en activo como tales, no quieren dejar pasar la ocasión de contribuir a la divulgación de la Historia de Canarias.
El último número, cuya edición ha sido posible gracias a una subvención de la Consejería de Educación, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias, a través de la Dirección General del Libro, Archivos y Bibliotecas de la Viceconsejería de Cultura y Deportes, está dedicado, entre otros temas, al estudio de la figura de Juan Negrín, Secundino Delgado y la Ley de Memoria Histórica. Entre los especialistas que colaboran en este número se encuentran los historiadores Ángel Viñas (Universidad Complutense de Madrid), A. José Farrujia de la Rosa (Sociedad Española de Historia de la Arqueología), Manuel Hernández González (Universidad de La Laguna), Blanca Divassón Mendívil (Universidad de La Laguna), y Félix Rodríguez Mendoza (Universidad de La Laguna).
El nº16 de Canarii, de 28 páginas, gran formato a todo color, está a la venta en los principales quioscos de toda Canarias al precio de 1 Euro. Parafraseando a Churchill, Nunca tanto costó tan poco.

lunes, diciembre 07, 2009

Aminatu Haidar, tres semanas en huelga de hambre

Los españoles tenemos un sentimiento de culpabilidad que no muchos confesamos ante el enquistado problema de la solución del conflicto entre la República Árabe Saharaui Democrática y Marruecos, después de que éste último invadiera los territorios de la que, hasta 1976, había sido colonia española del Sáhara Occidental. Son ya más de treinta años de ocupación marroquí de un territorio que pertenece al pueblo saharaui, y durante todo este tiempo Marruecos no ha cesado de violar los derechos humanos de la población civil. Y no lo ha hecho en solitario, sino con la complacencia de las naciones europeas que, en el pasado, se repartieron el continente africano, España entre ellas. Y, por supuesto, con el apoyo de Estados Unidos, que siempre ha mirado con buenos ojos el régimen alaui.
Desde hace tres semanas una activista saharaui, Aminatu Haidar, que durante muchos años no se ha dejado someter a la tortura del aparato represor marroquí, está en huelga de hambre en el Aeropuerto de Lanzarote, en protesta por no haber sido autorizada a regresar a El Aaiún, después de haber salido de su tierra para recoger un premio a su labor en Estados Unidos. Como tantos saharauis, Aminatu regresaba a su país desde Canarias, y en este Archipiélago espera, desde hace tres semanas, por una decisión de Marruecos que, cada vez, parece estar más lejos de conseguirse. Todos deseamos ver a Aminatu Haidar como hasta ahora, viva y lúcida, defendiendo los derechos de su pueblo. Pero si muere, estoy seguro de que este hecho marcará un antes y un después en la defensa de la causa del pueblo saharaui y la movilización internacional en pro de la resolución del conflicto. Solo espero que el Gobierno de España, por una vez en más de treinta años, asuma su responsabilidad política. Espero verlo algún día, y espero que Aminatu Haidar también lo pueda ver.